Las razones por las que la IA embelesa a las marcas
Celeridad, sostenibilidad y creatividad con esteroides: por qué abrazan las marcas la IA
La rapidez, los costes reducidos y la menor huella medioambiental de la publicidad generada con IA seducen a las marcas.
La cacareada imagen del Papa enfundado en un estiloso plumífero de color blanco demostró al mundo las posibilidades (virtualmente infinitas) alojadas en las entrañas de la inteligencia artificial (IA) generativa. Aquella imagen, que se convertiría más tarde en carne de «meme», engañó a millones de internautas a lo largo y ancho del mano gracias a su impactante realismo. Confrontados con la instantánea de marras, muchos creyeron a pies juntillas que el hombre allí retratado era realmente el Sumo Pontífice. ¿Cómo no iba a serlo?
Esa imagen, cuyos ecos aún resuenan en la red de redes tras su debut en marzo de este año, colocó bajo los focos las oportunidades para la industria de la moda de una tecnología a la que ya ha hincado el diente en los últimos meses toda una plétora de firmas a la hora de dar forma a sus campañas de publicidad.
La marca de ropa enfocada al público millennial Revolve, la firma de punto sostenible Sheep Inc. o Louis Vuitton son solo algunas de las marcas que se han arrojado ya en los brazos de la IA.
A las marcas les seducen de esta tecnología la notable merma en los tiempos de producción que lleva aparejada la IA y también sus innumerables posibilidades en el plano creativo.
«La proposición de valor de la IA es muy clara para las marcas», explica Nima Abbasi, socia de la agencia especializada en inteligencia artificial generativa Maison Meta, en declaraciones a WWD. «Lo que la IA aporta a las marcas es prácticamente creatividad con esteroides. Estamos ante una creatividad más rápida y también más expansiva, con ideas que sería imposible probablemente recabar en equipos formados íntegramente por personas de carne y hueso», subraya.
La campaña para celebrar el 20º aniversario de Revolve, que rubrica Maison Meta, tardó, por ejemplo, apenas tres semanas en ver la luz. «Sin la IA es imposible concebir la producción de una campaña en tan poco tiempo. Además, se reducen ostensiblemente los costes de producción», dice Abbasi.
Para las marcas, obligadas a generar contenido de manera constante para conectar con el consumidor en todos los canales (tanto online como offline), la entrada en escena de la IA es una bendición en un momento que buena parte de los anunciantes deben apretarse necesariamente el cinturón. Con la IA a su vera, «las marcas pueden satisfacer las necesidades del consumidor en todos los canales a un coste mínimo», recalca Abbasi.
«Lo más importante para nosotros es espolear la creatividad y aprovechar la tecnología para hacer cosas que de otro modo no podrían hacerse«, señala Michael Mente, cofundador de Revolve.
En la campaña para conmemorar su 20º aniversario Revolve quería alejarse de los cánones imperantes en la industria de la moda y apoyándose en la IA logró un resultado notablemente fresco y novedoso permeado de un surrealismo que hubiera sido quizás imposible sin la intervención de esta tecnología.
Costes más bajos, rapidez y menor huella medioambiental: las ventajas de la publicidad nacida del vientre de la IA
«La IA nos permitió una flexibilidad de la que no habríamos disfrutado si hubiéramos efectuado la filmación de la campaña en un solo día», dice Mente, que valora especialmente que en esta tecnología existe un control mucho mayor sobre el resultado final (y el proceso de creación es simultáneamente mucho menos estresante).
También ha apostado por la IA en una de sus últimas campañas la marca de punto sostenible Sheep Inc. «Puede parecer contraituitivo que una marca tan involucrada en las prácticas sostenibles use la IA, pero para nosotros la apuesta por esta tecnología es también una forma de reducir el impacto medioambiental de la compañía», indica Edzard van der Wyck, CEO y cofundador de Sheep Inc.
«Las imágenes generadas con IA nos permiten engendrar campañas increíbles sin el coste medioambiental que llevan aparejados normalmente los ‘photo shoots’ tradicionales en términos de transporte, equipo de producción y generación de residuos. La IA nos permite también mostrar parajes naturales sin necesidad de desplazarnos a tales parajes y mancillarlos potencialmente», dice van der Wyck.
«Nuestra decisión de apostar por la IA no echa anclas única y exclusivamente en los números contantes y sonantes. Es también una manera de elegir una forma de producción más sostenible y en línea con la filosofía de nuestra marca«, subraya el CEO de Sheep Inc.
Se han rendido asimismo a los encantos de la IA la firma francesa Louis Vuitton, que utilizó esta tecnología para alumbrar un deslumbrante reportaje de 30 páginas publicado hace unos meses en la revista Cultured Magazine y creado en colaboración con el artista David King Reuben.
«Trabajar con la IA implica que no son necesarios los sets ni las modelos ni la iluminación ni los fotógrafos», recalca Reuben, que tardó apenas 10 días en completar el proyecto.
De acuerdo con Sarah Harrelson, redactora jefe de Cultured Magazine, la artesanía de la que siempre ha presumido Louis Vuitton puede coexistir en perfecta armonía con la IA.
«La IA es obviamente una tecnología poderosa y compleja, pero como editora creo que es realmente importante abrazar este tipo de soportes de nueva hornada«, indica Harrelson.