EN 2020, 10 FABRICANTES VENDERÁN EL 90% DE LOS COCHES
En 2020, el 90% de los vehículos que se vendan provendrán como máximo de diez fabricantes diferentes, según el estudio A new era, realizado por Deloitte. Además, la mayoría de los consumidores que compren un vehículo lo harán por primera vez, y no como ocurre ahora, que la mayoría de los compradores de coches lo hacen por renovar su vehículo.
Deloitte estima que en 2015 se venderán 70 millones de vehículos y que la mayor parte de ellos serán vehículos pequeños, de consumo energético eficiente y coches urbanos baratos. La mayoría de los automóviles se producirán en China y Sudamérica, mientras que los fabricantes de Europa Occidental, Norteamérica y Japón tendrán que encontrar nuevos conceptos para mantener sus cuotas de mercado, por ejemplo, mediante la introducción de nuevos sistemas de energía.
Una consecuencia de las florecientes ventas en los mercados emergentes es el aumento de la producción en esos países. En general, en 2020 se importarán menos automóviles y la mayoría se fabricarán en el territorio en el que se venden, según Deloitte en el informe A new era.
El comportamiento de los consumidores será decisivo para el sector. En los países industrializados, el consumidor tomará decisiones cada vez más meditadas y conscientes del valor del producto. Pero ese ‘valor’ puede referirse tanto a un coche ecológico como a uno que ofrezca mucha calidad y seguridad.
En cambio, las clásicas ideas de estatus y lujo tendrán cada vez menos importancia. En los mercados emergentes, el número de consumidores que compren por primera vez un automóvil va a crecer de forma espectacular. Estos compradores también tienen en cuenta el valor, pero necesitan ante todo un vehículo asequible.
Otra tendencia responde a la creciente urbanización del entorno: el mercado demanda cada vez más automóviles pequeños y manejables para hacer competencia al transporte público. También está influyendo en el mercado el envejecimiento de la población y sus necesidades particulares.
Para muchos, el futuro del automóvil está en la propulsión eléctrica. En Europa se cuenta con la disposición a la compra de los consumidores y la UE espera que la producción de este tipo de vehículos reciba un impulso en 2011. Aun así, la popularización de los vehículos eléctricos aun tiene que superar algunos obstáculos, que abarcan desde el desarrollo de infraestructura hasta la fabricación de baterías eléctricas más prácticas, con mayor rendimiento y más asequibles. Además, aun no hay respuesta a la cuestión de qué tipo de propulsión es la que menos CO2 emite. Por el momento, el motor de combustión de consumo energético eficiente es la alternativa más usual, junto a los combustibles ecológicos.