Lidl secunda los planes del ministro alemán de Alimentación
Veto de la publicidad de comida basura: Lidl acepta de buena gana ponerse a dieta (publicitaria)
Lidl desea evitar la publicidad que coloca deliberadamente bajo los focos a los niños y quiere que más empresas sigan su ejemplo en este asunto en particular.
Cuando hace unas semanas Cem Özdemir, el ministro alemán de Alimentación y Agricultura, proponía el veto de los anuncios dirigidos a los más pequeños de la casa de alimentos poco saludables, la industria alimentaria dirigió aceradas críticas contra la controvertida propuesta del político de Los Verdes. Hay, sin embargo, una excepción a la norma. Y Lidl ha procurado públicamente soporte a los planes de Özdemir de cortar las alas de manera severa a la publicidad de comida basura específicamente dirigida a los niños.
De acuerdo con el diario Welt am Sonntag, la cadena germana de supermercados desea evitar la publicidad que coloca deliberadamente bajo los focos a los más pequeños y quiere que más empresas sigan su ejemplo en este asunto en particular. «Esperamos que esta iniciativa recabe más apoyos en el seno de la industria alimentaria», explica Christian Härtnagel, CEO de Lidl en Alemania, en declaraciones a Welt am Sonntag.
El retailer teutón quiere persuadir además a los proveedores de cambiar el packaging de sus productos para que no hagan guiños a los más pequeños de la casa si son alimentos ricos en grasa, sal y azúcar.
Pese a que el proyecto del ministro de Los Verdes Cem Özdemir resulta inevitablemente polémico porque implica el veto publicitario de productos perfectamente legales, Härtnagel cree que es necesario animar a las marcas a dar una vuelta de tuerca a su publicidad para impedir que esta se dirija a los niños.
Lidl quiere animar a sus rivales a secundar su ejemplo
Desde el punto de vista Härtnagel, iniciativas como la de Lidl redundan asimismo en beneficio de la igualdad de oportunidad cuando un producto dirigido específicamente a los niños comparte los lineales en los supermercados con marcas neutrales en sus envases.
A principios de este año, antes de que Özdemir diera cuenta de sus planes para echar el freno a los anuncios de comida basura entre los niños, Lidl anunció que dejaría de hacer publicidad de alimentos no saludables dirigida específicamente a los más pequeños, en línea con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Lidl se comprometió a dejar de promocionar entre el público infantil (tanto en la publicidad como en el propio packaging de los productos) alimentos poco saludables como los yogures y las bebidas altamente azucaradas y el chocolate.
La compañía germana hará, no obstante, algunas excepciones a la norma y sí hará publicidad dirigida a los más pequeños de la casa de alimentos no saludables en Navidad, Pascua y Halloween.
Lidl se dispone además a dar fuelle al marketing y la publicidad de alimentos saludables entre el público infantil. «Los cimientos de nuestra dieta se levantan durante nuestra infancia», recalca Härtnagel.