Las comunidades de propietarios ingresan unos 72.000 euros anuales por ceder sus azoteas a las empresas de publicidad, que alquilan el espacio a las grandes marcas como, por ejemplo, Iberia, Samsung o Mahou. Las zonas más disputadas por las agencias publicitarias son la Avenida de América o el eje de la Castellana.

La tarifa para exponer los rótulos en las azoteas es muy variable, ya que depende de lo que los propietarios pidan, la temporada, la marca y el emplazamiento. Por otro lado, influye además la crisis económica, que ha desplomado los precios y la demanda.

El ayuntamiento cobra 242,75 euros por cada licencia de tres años y los rótulos se regulan por la Ordenanza de Publicidad Exterior de 2009. Hay sólo cuatro rótulos en Madrid que incumplen la normativa vigente, pero el Ayuntamiento ha hecho la vista gorda debido a su valor simbólico: el luminoso de Schweppes en Callao, el Tío Pepe en la Puerta del Sol, el del BBVA en la Castellana y el Firestone situado cerca de las Escuelas Aguirre.

En cuanto a las lonas publicitarias, éstas resultan trambién un gran negocio para la comunidad de vecinos, que cobran unos 100.000 euros al mes por insalar una en su fachada. Hacienda planea subir la tasa por la publicidad en los edificios, lo que le permitirá recaudar el 25% de los ingresos que reciben los propietarios. El año pasado se concedieron el 80% de las 800 solicitudes para la instalación de lonas, según informa Hacienda. El Ayuntamiento se limita a la comprobación de que no se superen los plazos solicitados, condicionados a la duración de la obra.