El streaming, protagonista en la reestructuración de Disney+
Disney anuncia una reestructuración que convierte el streaming en su "ojito derecho"
La empresa de Mickey Mouse anunció este lunes una reestructuración de sus divisiones de medios y entretenimiento con el último objetivo de colocar bajo los focos su servicio de vídeo en streaming.
Nuevos tiempos, nuevas estructuras. Esta parece ser la particular máxima de Disney en tiempos de coronavirus. Y es que la pandemia ha tenido un impacto de primer orden en el negocio del gigante del entretenimiento.
La empresa de Mickey Mouse anunció este lunes una reestructuración de sus divisiones de medios y entretenimiento con el último objetivo de colocar bajo los focos su servicio de vídeo en streaming.
¿El objetivo de Disney? Centralizar su negocio de medios y concentrarlo en una única organización que llevará las riendas de la distribución de contenido, de la venta de publicidad y de la plataforma Disney+.
Tras este anuncio, que parece contar con el favor de los inversores, los títulos de Disney pegaron un brinco de más del 5%.
La reestructuración del negocio de Disney obedece a los cambios en los hábitos de consumo propiciados por el COVID-19, que han elevado a los altares a los servicios de vídeo de streaming y han hundido, en cambio, en el infierno a las tradicionales salas de cine.
A finales de agosto Disney contabilizaba 100 millones de suscriptores en sus diferentes plataformas de vídeo en streaming (y más de la mitad eran clientes de Disney+).
Kareem Danies, el que fuera presidente de juegos y publicidad de Disney, encabezará la nueva división de distribución de entretenimiento y medios de la multinacional estadounidense.
El coronavirus ha aumentado la dependencia de Disney del streaming como consecuencia de la crisis de los cines
Tras permanecer varios meses cerrados como consecuencia de la pandemia, los cines han recibido un duro varapalo y con ellos también Disney, que acostumbraba a presentar allí sus películas con el último objetivo de convertirlas en auténticos «taquillazos» (algo que ocurría con bastante frecuencia gracias a la varita mágica de la compañía de Mickey Mouse).
En Estados Unidos, la patria chica de Disney, los cines no levantaron la persiana hasta finales de agosto y su recaudación en taquilla ha sido particularmente baja desde entonces.
Como consecuencia de la crisis del cine Disney ha aplazado varios estrenos en los últimos meses, incluyendo el filme de Marvel Black Widow o Soul de Pixar, que ni siquiera llegará a la pantalla grande y se estrenará el próximo mes de diciembre en Disney+.
Idéntica estrategia adoptó Disney para el estreno de Mulan, que finalmente no aterrizó en las salas de cine y se distribuyó a través de su división de vídeo en streaming con un coste adicional de 21,99 euros.
En el nuevo Disney Alan Horn y Alan Bergman seguirán capitaneando los estudios de Disney, Peter Rice liderará el grupo general de entretenimiento, y James Pitaro continuará estando al mando del contenido deportivo de la compañía.
«Dado el enorme éxito de Disney + y nuestros planes de acelerar los productos que llegan directamente al consumidor, estamos posicionando nuestra compañía de manera estratégica para apoyar nuestro crecimiento de manera efectiva«, explica Bob Chapek, CEO de Disney. «Gestionar la creación de contenido y por otro lado, la distribución nos va a permitir ser más efectivos y ágiles a la hora de crear el contenido que quieren los consumidores en el formato en el que prefieren consumirlo», añade.