20 hombres sin cabeza irrumpen en las calles de Barcelona

La inmediatez y la viralidad son paradas esenciales en la publicidad de hoy en día, obligada a reinventarse para tener impacto. La última acción en llamar la atención ha sido un extraño fenómeno que ha dejado perplejos tanto a residentes como a turistas esta mañana en el centro de Barcelona: 20 hombres sin cabeza deambulando por las calles de la ciudad condal.

Nadie sabe con certeza cómo o por qué han aparecido estos hombres ni a qué se debe, sino que todo lo que se dice son especulaciones y rumores. Una performance, un truco de magia o una broma son algunas de las opciones de este misterio sin resolver (por ahora).

A pesar de su apariencia inusual, estos hombres sin cabeza parecen ser pacíficos y no han causado ningún daño. De hecho, muchos viandantes se han acercado para tomarse selfies con ellos para compartirlas en redes sociales.

¿Quiénes son? ¿Por qué están aquí? ¿Cuál es su propósito? Son múltiples las cuestiones que revolotean alrededor de esta acción, pero habrá que esperar para conocer cuál es el origen de esta extraña situación.

@mktdirecto 20 hombres sin cabeza se han paseado esta mañana por Barcelona y han dejado a los viandantes con la boca abierta ??? ¿Qué habrá detrás de esta acción? #parati #foryou #fyp #viral #streetmarketing #marketing #publicidad ? sonido original – MarketingDirecto.com

Recuerda, en cierto modo, a esas 20 personas disfrazadas de dinosaurios hinchables que invadieron el centro de Madrid a principios de año. Nadie sabía nada de ellos, hasta que se destapó que la marca que estaba detrás era Goiko. La firma decidió emplear esta táctica para anunciar el regreso de dos de sus hamburguesas a la carta.

Las marcas apuestan por las activaciones de street marketing por el impacto que conllevan. Así, aparte de la comentada, este año hemos podido ver otras que han sorprendido a pie de calle. Por ejemplo, Finetwork replicó el set del streamer Nil Ojeda en la plaza de Nuevos Ministerios, en la capital, y le retó a no poder salir del cubículo hasta que agotara todos los gigas, mientras hacía un directo.