Un estudio internacional realizado por diez organizaciones de consumidores de cuatro continentes ha revelado que las tiendas online tienen algunas carencias graves. Empecemos a enumerarlas: uno de cada diez pedidos no se tramita; se tarda demasiado en devolver el dinero (en algunos casos, incluso un mes); en la mayoría de los casos no se entrega ningún recibo,… ¿Les parecen pocas estas quejas? Pues la asociación alemana de consumidores (Arbeitsgemeinschaft der Verbraucher, AgV) tiene otra más: sólo un tercio de las tiendas online especifican claramente las condiciones de compra-venta.
Las asociaciones de consumidores, en vista de este panorama, exigen reglas y leyes internacionales que defiendan los derechos de los compradores.

La situación es la misma en los Estados Unidos. De una encuesta realizada por e-buyersguide.com se desprende que el 9% de los usuarios de estas tiendas están muy descontentos con su funcionamiento. Estas cifras deberían preocupar de veras a sus responsables, ya que el 13% de los clientes decepcionados con un online-shop no piensan volver jamás a él.
Mientras tanto en nuestro país seguimos obstinados con que la culpa del desencanto o falta de compras online la tiene la ausencia de una tarifa plana, falta de seguridad al pagar con tarjetas de crédito en la red, falta de costumbre de compra a distancia del consumidor español/latino. Abramos nuestras mentes a otros argumentos aunque estos provengan de un estudio, que no sabemos por qué, todavía no se ha realizado en nuestro país o en los mercados de nuestro área cultural e idiomático