La revolución del e-commerce: las marcas ya se suben al carro de la realidad virtual
Si hasta hace unos años el e-commerce era una práctica en la que pocos consumidores confiaban, en la actualidad esta modalidad de compra está plenamente integrada en la vida de los usuarios de internet y, no solo eso, sino que cada año incrementa su popularidad.
A esto han contribuido varios factores entre los que destacan las mayores facilidades de pago a través de internet, la rapidez de los envíos, la comodidad de comprar desde caso y, sobre todo, la mejora de la confianza y la seguridad de los consumidores en cuanto a sus datos personales y bancarios.
Sin embargo, el rápido avance las tecnologías ha hecho que este sector vaya un paso más allá y son muchos los retailers que consideran el comercio online un canal imprescindible para sus negocios. Y no es de extrañar pues el pasado año cerró con cifras históricas de compras digitales.
El auge de nuevas tecnologías como la realidad virtual no solo ha impactado el mundo del entretenimiento y los videojuegos sino que, en muy poco tiempo también transformará la forma en la que los usuarios compran online.
Y es que, si por algo se caracterizan los consumidores es por ser cada vez más exigentes con los productos que adquieren y no solo demandan calidad en los productos sino la posibilidad de testarlos antes de pagar por ellos, algo que hasta ahora solo era posible en las tiendas físicas.
El mundo digital ya está siendo testigo de nuevas experiencias de compra que permiten, gracias a la realidad virtual, probar los productos de una manera sorprendentemente fiel a la realidad.
Algunas marcas como Facebook con su tecnología 360 grados han abierto las puertas virtuales a numerosas marcas que ya comienzan a experimentar para ofrecer una experiencia de calidad y única a los consumidores. La BBC, NARS, Tommy Hilfiger o Dior ya ponen al alcance de sus usuarios experiencias inmersivas en sus tiendas.
Sin embargo, todavía habrá que esperar un poco para que estas prácticas aterricen en el mundo digital, pues faltan por solventar algunos problemas como una mayor expansión de los cascos de realidad virtual entre el público, algo que actualmente muy pocos tienen a su alcance.
De todas formas, el surgimiento de nuevos proyectos virtuales de bajo coste harán que esta tecnología se más asequible para el público de masas y pronto será una herramienta más del e-commerce.
La realidad aumentada también tiene su hueco en las compras online, especialmente en el sector del mueble y es que, la posibilidad de colocar de manera virtual un mueble en nuestra propia casa proporciona una idea visual sobre el potencial de las compras. Pero va más allá, pues también permite diseñar baños, cocinas o habitaciones personalizadas en función del espacio de las casas de los usuarios.
Así, estas nuevas formas de compra enriquecen las experiencias de los usuarios que, aunque no pueden tocar físicamente el producto, sí les permite visualizar objetivos de una manera muy fiel a la realidad gracias al 3D, la realidad virtual y la realidad aumentada.