
Marketing y PublicidadPackaging como herramienta de marketing
La importancia del packaging como herramienta indispensable de marketing
¿Cómo puede ayudar el packaging a enamorar a los consumidores?
Si paseas por los pasillos de un supermercado o de una tienda física se hace evidente la multitud de productos perfectamente colocados y vestidos con su packaging esperando ser los elegidos. Una explosión de colores y de creatividad inundan los lineales. Enamorar a los consumidores es la finalidad de todas las marcas y, siendo fiel a este propósito, el packaging juega un papel determinante.
En la voluntad de enamorar, cada detalle cuenta, y no sólo el contenido importa, sino también la forma en que lo recibimos. Ahí entra en juego el papel del packaging, un elemento fundamental en la experiencia del consumidor.
El embalaje debe cumplir una función esencial de protección del producto, debe llegar al punto de venta y pasar por los almacenes sin que este resulte dañado. Sin embargo, cada vez más, la estética del envoltorio alcanza una importancia mayor; llegando a convertirse en parte del encanto del propio producto.
Esta importancia del packaging ha crecido de forma considerable en los últimos tiempos, tanto, que hasta el proceso de “unboxing” se ha convertido en un ritual de gran interés para las audiencias, que disfrutan del proceso de desenvolver los productos. No hay duda, por tanto, de que la imagen del envoltorio ya no es simplemente una utilidad práctica, sino además una herramienta de marketing de gran valor.
En una empresa como Cideyeg llevan 60 años dedicados a «vestir los productos», como ellos mismos afirman. La empresa cuenta con una maquinaria de última tecnología y unas instalaciones de más de 10.000m2. Este hecho contribuye a alcanzar uno de sus objetivos principales, que es dar solución y forma a cualquier idea o proyecto para destacarlo en el lineal.

Técnicas y acabados personalizados: un mundo de posibilidades
Personalizar cada pack es un reto que se plantea, en cada ocasión, des de cero. Los acabados aportan valor añadido y los dotes identificativos de cada marca y producto. Jugar con el brillo, las texturas o modificar las composiciones genera un impacto positivo en la decisión de compra.
Desde la empresa resaltan varias técnicas que contribuyen a una mejora del propio packaging; staming, barniz brillante o mate… aunque es la etapa final del proceso de creación e ideación del producto gráfico, es una de las más importantes por el sinfín de posibilidades que ofrece.
Entre los miles de acabados y técnicas que se pueden aplicar en un pack, destaca el stamping por el efecto “wow” que genera. Un resultado elegante y bien cuidado con un tono, normalmente, plata o dorado gracias a la aplicación de una película a base de celulosa vegetal. Es ideal para packs de perfumes que buscan diferenciarse con toques plateados y/o dorados combinados con sus colores corporativos.
Los barnices nacarados, o glitters, así como las serigrafias de volumen son otros acabados de efecto “wow”. Muy recomendables para resaltar y dotar de personalidad el pack.
Dar uno u otro acabado al producto impreso aporta resultados distintos. En este caso, aplicar un barniz brillante o mate a todo el pack, o solo una parte de él, es una excelente solución si se quiere transmitir una imagen de alta calidad y sofisticación, pues, el resultado final destaca por su delicadeza.

Por otra parte, la sociedad actual demanda un compromiso con el medioambiente en materia de sostenibilidad. En este punto, las empresas tienen una gran responsabilidad y más si forman parte de la cadena de custodia, como es el caso de Cideyeg Packaging. Cada paso del proceso de producción cuenta para garantizar que el producto cumple con la ética medioambiental, y no solo eso, para contribuir a un planeta más sano. El consumidor debe poder escoger libremente uno u otro pack y producto en función de si este cuida, o no, el medio ambiente.
Si se busca un pack responsable con el medio ambiente, la mejor solución es utilizar papel no estucado con certificados ecológicos, sin pesticidas ni productos químicos añadidos. Ya que el acabado final es mate, se puede combinar con stampings que dan ese toque brillante que busca enamorar el consumidor.
A modo de resumen, en la actualidad, el packaging se eleva como un elemento clave a la hora de marcar la diferencia. A través de un uso medido y adaptado a las necesidades del producto, es posible crear una imagen de marca en un mundo en el que la sobrexposición de contenido dificulta en gran medida que un producto pueda resultar diferencial para los consumidores.