La Super Bowl recupera a los protagonistas de Breaking Bad

La marca de aperitivos PopCorners debutará el próximo domingo en la Super Bowl y lo hará trayendo de vuelta una de las series de televisión más icónicas de los últimos tiempos, Breaking Bad, cuyo último capítulo se emitió hace ya diez años.

El spot de la filial de Frito-Lay, de 30 segundos de duración, lo protagonizan Bryan Cranston y Aaron Paul, que recuperan los roles de Walter White y Jesse Pinkman respectivamente. Sin embargo, Walter y Jesse parecen haber renunciado al «cristal azul» que les hizo famosos en Breaking Bad y son ahora fabricantes de inofensivos pero adictivos aperitivos de maíz.

Cuando Jesse pega un bocado a PopCorners, que queda totalmente prendado de su sabor, tanto que su socio Walter tiene que recordarle que no pueden zamparse sus propios suministros.

A continuación, Walter y Jesse dan a probar su mercancía a otro personaje de Breaking Bad, el narcotraficante mexicano Tuco Salamanca interpretado en la serie por Raymond Cruz.

Confrontado con el maravilloso sabor de PopCorners, Salamanca se descuelga con la era su frase favorita en Breaking Bad: «Tight, tight, tight!». Y encarga a Walter y Jesse que fabriquen PopCorners en siete variedades (y no seis).

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«La ambición de PopCorners de crear una extensión genuina de la serie y una campaña que encandilara realmente a los fans de Breaking Bad es lo que nos ha hecho recuperar nuestros personajes en este anuncio para la Super Bowl», explica Bryan Cranston. «A Walter no le habrían atraído de manera inmediata los ingredientes de PopCorners, por lo que ‘Breaking Good’ tiene todo el sentido del mundo como una realidad alternativa que habría sido efectivamente mucho mejor tanto para él como para Jesse», subraya.

«Break into Something Good» es el lema del spot de PopCorners para la Super Bowl, que remeda deliberadamente el característico logo inspirado en la tabla periódica de Breaking Bad.

El anuncio, donde vuelve a aparecer la mítica caravana en la que Walter y Jesse hacían de la suyas en la serie, lo dirige Vince Gilligan, el creador y director de Breaking Bad.

Una versión de 60 segundos del anuncio es aún más pródiga en referencias a la serie y en ella se abre paso, por ejemplo, la emblemática frase «Say my name» de Walter White.

El spot llevar la rúbrica de D3, la agencia in-house de Frito-Lay, que incursiona por primera vez en las pausas publicitarias de la Super Bowl de la mano de PopCorners.

Doritos, otra filial de Frito-Lay, se anunciará asimismo en la final de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) con un spot protagonizado en esta ocasión por los cantantes Jack Harlow y Missy Elliott.