Estrategia de los colores y el branding deportivo
¿Cómo influye la estrategia de colores en las marcas deportivas?
Sabemos de primera mano lo mucho que trabajan el branding las marcas para conseguir posicionarse en el mercado
Los colores han demostrado tener un sólido efecto psicológico, además de impactar fuertemente en la memoria, por lo que este es un aspecto que las corporaciones nunca dejan de lado. Sigue leyendo para explorar con nosotros el efecto de la estrategia de colores en las marcas deportivas.
¿Qué hay detrás de la psicología del color?
La evidencia científica nos confirma que los colores afectan realmente a nuestras emociones y percepciones y que esto es algo que podemos extrapolar a distintos ámbitos de nuestra vida. Las marcas deportivas, con su ánimo de mostrarse fuertes, resistentes, flexibles, rápidas… han aplicado cautelosamente estos conocimientos al definir sus colores, pues saben que los consumidores los asociaremos de forma inconsciente con los valores elegidos.
Colores y sus significados en el contexto deportivo
Vamos a ver en detalle cuál es el efecto de cada uno de los colores en nuestra mente, y como las marcas lo utilizan para modelar nuestra percepción sobre ellas.
Colores primarios
Los colores primarios son los más usados por las marcas y esto no es casualidad. El rojo, azul y amarillo son considerados absolutos y únicos, porque no se pueden obtener por la mezcla de ningún otro color, un mensaje muy potente si lo trasladamos al branding.
El rojo es probablemente el más popular y se asocia con emociones intensas, acción, poder y actividad, por lo que no es de extrañar que marcas deportivas como The North Face, New Balance o Puma lo quieran para su imagen. El azul, por su lado, es el preferido de muchas grandes corporaciones porque desprende estabilidad, confianza, compromiso y racionalidad. Por esto lo encontramos en marcas deportivas como Hooka, pero también en otras muy diversas como Skype, https://www.platincasino.es/, American Express o BMW. Por último, el amarillo se relaciona con la alegría, la energía y el éxito, y fue escogido, por ejemplo, como el color principal de Los Lakers.
Colores secundarios
Si nos movemos a los colores secundarios, los que se obtienen por la mezcla en distintas proporciones de los colores primarios, entramos en un gran abanico de tonos y significados.
El verde, por ejemplo, es el color de la naturaleza, la esperanza y el crecimiento; mientras que el naranja se asocia con el entusiasmo, la creatividad y la amistad. Por otro lado, el púrpura es sinónimo de ambición, pero también de delicadeza y sabiduría; el blanco de pureza, minimalismo y simplicidad; el negro de poder y sofisticación y el marrón de calidez y honestidad. Sin duda, todos ellos son aplicables en un contexto deportivo, solo es tarea de las marcas elegirlos según el mensaje que quieran transmitir.
Ejemplos de marcas deportivas y su estrategia de colores
Tal como veníamos viendo, las marcas han aprendido a utilizar la psicología de los colores para transmitir su mensaje, pero, además lo han sabido combinar con otros elementos para reforzar esta imagen.
Nike, por ejemplo, eligió su nombre inspirándose en la diosa de la victoria Niké, un guiño inteligente para una marca deportiva, e incorporó el icónico “Swoosh” como representación del ala de la diosa. Además, adquirió el negro, relacionado con el poder y la sofisticación, como color principal para dar un sentido completo a su imagen que, sin duda, ha sido tremendamente exitosa.
Otro caso de éxito ha sido el de Under Aromour, que decidió incorporar más de un color en su logotipo para comunicar más de una emoción. En su caso, los elegidos fueron el negro y el rojo, que combinados transmiten fuerza, energía, poder y resiliencia, todos muy importantes en el deporte.
Adaptación cultural y geográfica de la estrategia de colores
Es relevante mencionar que además del efecto psicológico de los colores, existe también un factor cultural que puede afectar a nuestra percepción sobre ellos y esto es algo que las marcas deben tener en cuenta al internacionalizarse.
Por ejemplo, en occidente, el blanco simboliza la pureza, la bondad y la inocencia, mientras que en la cultura oriental, se asocia al duelo. Así mismo, al no poderse usar el blanco, en oriente celebran las ceremonias nupciales con el rojo porque para ellos representa la celebración.
Por otro lado, vemos como las asociaciones de colores con los sabores cambian también con el país. Por ejemplo, las Lay’s originales son rojas en la parte Oeste de Europa, mientras que en la parte Este son amarillas.
El color como diferenciador en un mercado competitivo
La internacionalización y el acceso a todos los mercados con tan solo unos clics ha hecho que la competencia entre marcas sea una lucha constante para conseguir la atención de los consumidores. Las empresas saben que cada una de las acciones que puedan tomar, por pequeña que sea, puede ser decisiva en la elección del cliente, y el color ha demostrado ser un factor clave a la hora de destacar en medio de la competencia, por esto es tan importante para ellas y lo aplican con tanta precisión.
Cuando pensamos en Asics, por ejemplo, nos viene a la mente un producto fiable, seguro y respaldado por estudios y casualmente su color es el azul, un color relacionado con la seriedad. Wilson, por su lado, eligió el rojo para su marca, porque quiere transmitir acción y velocidad para sus raquetas.
Consideraciones para elegir los colores en el branding deportivo
Después de entender la importancia de los colores a la hora de crear una imagen corporativa, creemos interesante mostrar cuál sería la forma de elegir un color en el branding deportivo. Por supuesto, no hay una única respuesta correcta, de lo contrario todas las marcas habrían elegido el mismo color. Primero, empezaremos identificando y listando la personalidad y todos aquellos valores con los que nuestra marca se identifica. Lo segundo será reflexionar y conocer nuestra audiencia objetiva y cuál sería su respuesta a los colores en función de su ubicación geográfica y cultura. Por último, de todos los colores disponibles y el mensaje que transmite cada uno, deberemos elegir aquel que ofrezca una mayor coherencia con aquello que nos define.
Sin duda alguna, la elección del color para el branding de una marca no es algo que debamos tomarnos a la ligera. La estrategia de los colores, especialmente en las marcas deportivas, tiene una grandísima influencia, por lo que habrá que elegir cautelosamente los colores para lograr una conexión emocional y transmitir los valores deseados.