líderes en noticias de marketing, publicidad y marcas

Más de la mitad de los empleados entona (a modo del himno) la canción de

Tendencias en MarketingMás de la mitad de los empleados cree su salario está por debajo de la media

Por qué tantos empleados se quedan de estar mal pagados

Más de la mitad de los empleados entona (a modo del himno) la canción de "La mal pagá"

Esther Lastra

Escrito por Esther Lastra

Según un reciente estudio de PayScale, el 51% de los trabajadores cree estar cobrando emolumentos por debajo del mercado.

El mercado laboral se ha visto atrapado en una auténtica vorágine de cambios en el último año. Primero vinieron los despidos y los recortes en los salarios y más tarde, ya con las aguas más calmadas tras la tormenta ocasionada por la pandemia, las ofertas de trabajo comenzaron a reproducirse como setas y simultáneamente muchos empleados decidieron cortar amarras con las empresas que les tenían en nómina.

Es más que evidente que las compañías tienen un problema de retención de talento y ese problema podría estar directamente emparentado con salarios no del todo justos (a ojos de los empleados al menos).

Según un reciente estudio de PayScale, el 51% de los trabajadores cree estar cobrando emolumentos por debajo del mercado. Sin embargo, en el turbulento mercado laboral los empleados no tienen en realidad demasiado claro si sus emolumentos son o justos. A fin y al cabo, quienes aseguran estar cobrando sueldos excesivamente bajos perciben en realidad salarios que están muchas veces en la media o por encima de la media.

La friolera del 86% de los trabajadores considera que sus emolumentos están en la media o por debajo de la media cuando en realidad no lo están. Y el 28% de quienes de verdad pueden entonar aquello de «la mal pagá» creen que están siendo remunerados justamente (hasta que se topan de bruces con la cruda realidad).

Se trata de un dato preocupante si tenemos en cuenta que los empleados que se consideran mal pagados están hasta un 49,7% más predispuestos a buscar un nuevo trabajo, tal y como recoge Fast Company.

La falta de transparencia de las empresas en sus sistemas salariales hace huir en desbandada al talento

Es más que evidente que la manera en que los empleados juzgan sus salarios es extraordinariamente subjetiva. Y sin una conversación franca y sincera con sus inmediatos superiores, están especialmente prestos a asumir que están mal pagados cuando no lo están y también a atribuir cualidades negativas a las empresas de las que forman parte.

Cuando los malentendidos en torno al salario no se abordan apropiadamente, las malas intenciones que los trabajadores endilgan a sus empleadores cobran mayor fuerza y les animan a buscar aún con mayor ahínco nuevas oportunidades laborales en empresas donde creen que los salarios son mejores y más transparentes.

Pese a la mala fe que muchos trabajadores atribuyen a las empresas, lo cierto es que la mayoría intenta remunerar a su plantilla de manera justa y competitiva.

De acuerdo con los datos manejados por PayScale, más del 80% de las empresas asegura que paga de manera equitativa a sus empleados basándose en datos reales sobre salarios a fin mantener en niveles óptimos el engagement de la plantilla. Y menos del 8% admite intentar pagar los menos posible a sus trabajadores para ahorrar en masa salarial.

Desafortunadamente las compañías hacen un trabajo pésimo comunicando sus prácticas salariales a la plantilla. Casi la mitad de los empleadores jamás comparte sus rangos salariales con su plantilla o no dispone siquiera de tales rangos. Y solamente el 33% de las organizaciones se toma al menos la molestia de compartir los rangos salariales con sus empleados en conversaciones individuales.

Los datos de PayScale demuestran que hay una estrecha correlación entre la transparencia salarial y el deseo de los trabajadores de trabajar en otra parte. Y en este sentido cuanto menor es la transparencia, más predispuestos se sienten también los trabajadores de buscar nuevas oportunidades laborales. Por esta razón, a fin de retener el talento las organizaciones deben abandonar la opacidad e informar adecuadamente a su plantilla de los parámetros por los que se rigen sus salarios.

 

Cacaolat tiene la llave maestra para ganar en el LOL (y en la comunicación en eSports)AnteriorSigueinteEstrella Galicia se postra ante El Profesor y lanza una edición especial de La casa de papel

Contenido patrocinado