El 57,6% conecta mejor con las marcas que muestran personas reales
Según este estudio preferimos anuncios con "personas reales" y que nos hagan reír
El uso de personas normales y corrientes con las que podamos identificarnos en nuestro día a día puede ayudar a las marcas a conectar de mejor forma con sus consumidores.
De acuerdo a los resultados del último estudio realizado por la firma de investigación Toluna (encuesta en base a 1.000 adultos británicos), el 47,4% de los participantes no duda en afirmar que prefiere la publicidad protagonizada por personas reales con las que poder sentirse identificados.
El 17,2% ha respondido que prefiere los anuncios en los que aparecen celebridades, mientras que sólo el 7,1% se decanta por los anuncios protagonizados por actores.
Pero si hablamos del tipo de anuncios que más nos gusta consumir la cosa cambia. El 23,4% de los encuestados tiene claro que su primera opción es la publicidad que muestra situaciones realistas.
Muy lejos del 61,5% de aquellos que prefieren los anuncios que les hacen reír. Entre las respuestas ofrecidas aparecen los anuncios que reportan información útil (29%), y aquellos que nos hacen plantearnos situaciones establecidas (28,6%).
Este estudio también ha revelado que una de las grandes asignaturas pendientes de la publicidad es retratar a los clientes con realismo. El 34,9% de los encuestados opina que las marcas son poco realistas cuando reflejan a los consumidores en sus anuncios. Sólo el 13,8% cree que las situaciones e historias mostradas en publicidad son realistas.
El 57,6% de los participantes en el estudio ha indicado que han conectado de forma efectiva con las marcas que han mostrado o muestran a personas reales en sus anuncios. Y es que el 62,3% piensa que las marcas que trabajan con personas reales entienden mejor las necesidades y demandas de sus clientes.
Cerramos el repaso a estos datos con uno que deberá tener muy presente en futuras estrategias: el 48,3% no se siente cómodo con las marcas que muestran personas poco realistas o adecuadas a su realidad cotidiana en los anuncios.