líderes en noticias de marketing, publicidad y marcas

Transporte, alojamiento, segunda mano… la economía colaborativa reina en internet

Redacción

Escrito por Redacción Actualizado el

ShareMucho se ha escrito y comentado sobre la economía colaborativa: esa nueva forma de colaboración entre ciudadanos que, a grandes rasgos, pone en contacto a  personas con empresas o con otras personas para ofrecer o adquirir productos y servicios.

La economía colaborativa ha llegado y ha llegado para quedarse, aunque son muchos los que ven en esta nueva forma de hacer negocios una competencia desleal y que, en algunos casos, roza la ilegalidad.

Empezamos por el más famoso, como es Uber. Uber es una empresa estadounidense que ha cosechado tantos acuerdos como desacuerdos allí por donde ha pasado. Esta empresa ofrece, a través de su aplicación, que conductores particulares lleven a otros usuarios a donde estos últimos deseen y que reciben el pago a través de una transferencia gestionada por la compañía. El problema es que los taxistas de las ciudades en las que se ha instaurado se han quejado de que estos servicios son de transporte pirata, que no ofrecen garantías y que son competencia desleal, ya que ofrecen precios más bajos, no tienen que obtener una licencia como los taxistas y no hay control del gobierno. Desde Uber se defienden afirmando que ellos son un simple intermediario, pero esto, al sector del taxi, no le convence en absoluto. Por otro lado se encuentra BlaBlaCar o Amovens, en la que se ofertan y se demandan transportes de unas ciudades a otras: conductores que ofrecen sus coches para ir a un determinado lugar por un precio que ellos proponen o gente que quiere hacer un viaje y quiere ahorrarse un poco de dinero compartiendo coche con otra persona para compartir gastos en combustible. Los damnificados de estas ofertas de compartir coche con otros ha perjudicado a las compañías de autobuses principalmente, que han tenido que bajar los precios de las rutas para ser más competitivos en cuanto al transporte de viajeros. Si se tarda menos en coche, se va más cómodo y, encima, ahorra dinero, la opción era fácil.

Si, por el contrario, lo que queremos es comer, podemos acceder a páginas como La Nevera Roja o Just Eat y ver toda la oferta de restaurantes que tienen servicio a domicilio en la zona en la que nos encontremos. Y, aquí, todos ganan, ya que nosotros no siempre tenemos el teléfono de ese restaurante que nos gusta tanto y el restaurante, por otra parte, consigue estar en internet sin necesitar una infraestructura online propia.

Y si nos vamos de viaje compartiendo coche, pues también necesitaremos un sitio para alojarnos, y si podemos ahorrarnos algo de dinero, mejor. Airbnb pone en contacto a dueños de casas que quieren alquilar una habitación o la casa entera durante un tiempo determinado con gente que quiere ir de viaje durante un periodo de tiempo determinado. Obviamente, los hoteles y demás alojamientos hosteleros se han visto perjudicados, y son los que más se han quejado. Desde Airbnb, al igual que en Uber, ponen en contacto a gente y son éstos los que tienen que cumplir la legislación del país.

Pero no solo la economía colaborativa está presente en estos 3 sectores, ya que, desde Homejoy, podemos acordar con otra persona para que nos ayude con tareas en casa, desde arreglar una chapuza o que haga la limpieza de casa. Wallapop es un medio en el que encontramos productos a la venta de 2º mano en la zona que nos encontremos y Chicfy, que lo hace específicamente con ropa usada.

El auge de este tipo de empresas y aplicaciones hace pensar que las personas prefieren colaborar con otros. Si queremos comprar o vender algún objeto, sabemos que los particulares son más flexibles a negociaciones y que podemos encontrar productos a mejor precio y el trato, al final, es más personal, además de que muchas personas necesitan ingresos extras y venden productos de todo tipo para cubrir gastos u ofrecer servicios de transporte para cubrir asientos y ahorrar dinero. Si vamos a ver a nuestra pareja de Barcelona y podemos ir con alguien, nos ahorraremos dinero en el viaje e iremos acompañados o, si por el contrario, queremos vender esos regalos que una vez nos hizo nuestra ex pareja, lo podremos hacer a través de estas empresas y aplicaciones.

 

Google podría estar estudiando la compra de GoPro a principios de 2015AnteriorSigueinteAsí fueron las primeras veces de estos 12 términos más populares del marketing en Twitter

Contenido patrocinado