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Javier Piedrahita CEO & Founder de MarketingDirecto.com

ALEGATO DE UNA PROFESORA POR UN MODELO ECONÓMICO MÁS EQUILIBRADO Y MENOS SALVAJE

Estimad@ Usuari@,

La semana pasada le daba aquí mismo un primer avance de hacia dónde se mueve con enorme fuerza e importancia para cada uno de nosotros el mercado de la publicidad digital, tras visitar la feria congreso OMD en Düsseldorf. Esta semana profundizaba en dos columnas y exclusivas más sobre las tendencias avanzadas aquí y lo que allí pude recoger. Léalo por favor aquí y aquí para dejar así zanjado este tema crucial, y poder dedicarnos a otro que ya traía de cabeza a la sensata clase política alemana cuando estuve por tercera vez este año, en uno de sus potentes eventos de marketing que tanto me dan, nos dan a todos. Me refiero al descalabro de los bancos en Wall Street. Y que nos afecta a todos, también a este sector tan sensible con las malas noticias financieras.

Pocas veces podías ver en los medios alemanes que recibía aquellos días en formato papel y digital en el iPhone (y que ahora citaré) a una canciller alemana tan molesta con nuestros aliados y amigos norteamericanos. Desde hace tiempo el gran propulsor de una economía de mercado social estaba en desacuerdo con lo que veía. Un modelo que nos explicaba allá en los años 80 mi profesora de «ciencias sociales» en el colegio en Bonn. Aún recuerdo bien su lección machacona a toda una generación de personas que ahora le damos las gracias por lo que nos metió en las cabezas: «solo hay una vieja verdad, chicos. El dinero lo ganas en aquello en lo que eres realmente bueno. Donde somos mejores que los demás. Alemania no tendría éxito comercial si dejamos esa ventaja y nos ponemos a copiar a otros. Nuestra fuerza son productos de calidad altamente diferenciados. Y estos son el fruto de una economía de mercado corporativa que se fundamenta en un sistema educativo excelente, la formación dual (práctica y teoría al mismo tiempo), la autogestión, el partnership social con fuertes asociaciones, la estructura dual de una junta directiva y un consejo de administración (de vigilancia), la decisión compartida o cogestión y la función moderadora del estado. Nuestro modelo a seguir jamás será el capitalismo tipo salvaje oeste. Ni ahora ni en un futuro. Somos la locomotora de Europa (2,7% crecimiento en 2006, 824.000 parados menos en abril 2007 frente a abril 2006). Y lo hemos logrado sin anular la cogestión y sin la flexibilización completa del despido laboral. Sin seguir como ovejitas el modelo económico neoliberal de sello anglosajón. Seguimos agarrados a un modelo de claro balance entre justicia social y sentido común económico. Porque este es el modelo que fundamenta nuestro éxito. Más luego nuestros ciudadanos: vosotros, chicos. Cada uno deberá ser completamente móvil. Tendrá que formarse constantemente. Venderse cada vez más y mejor en un mercado más y más competitivo. En su empresa, en el mercado laboral. Tenéis que estar localizables en cada momento».

Pues Alemania, inventor tras la desastrosa Segunda Guerra Mundial iniciada por un loco y los que ciegos le siguieron, de esa economía de mercado social, que tanto bien hizo para crear esa potente y equilibrada locomotora económica de Europa, intentaba en estos últimos años una y otra vez indicar al Gobierno de EEUU y de Gran Bretaña que era importante controlar mejor los mercados financieros. Ni caso por parte de éstos, y nada de apoyo de los amigos europeos. En Alemania acusan ahora duramente a ese «turbocapitalismo» (neoliberal y opuesto a su modelo sostenible de la economía de mercado) de los países anglosajones, que ha impregnado todo un estilo de vida. Y, seamos realistas, también aquí en España desde donde en parte se miraba como hipnotizados a ese lifestyle donde hacer deudas está bien visto y ahorrar ya no se lleva. Como los bancos anglosajones podían colocar sus deudas en el mercado financiero, cualquiera era digno de un crédito. Muchas sucursales ni siquiera supervisaban las nóminas e ingresos de sus clientes antes de concederles un crédito. Y ahora tenemos el desastre y todos pagaremos el pato. Españoles, alemanes, americanos…

La prensa que allí leía cuando visité la OMD hablaba de un capitalismo de EEUU que se revela ahora como uno de esos sistemas económico-piramidales tan denostados, pero en este caso gigantesco. Y daban cifras de mareo: 5.400 millardos de dólares es el volumen de las hipotecas de Fannie Mae y Freddie Mac (dedicados al crédito hipotecario). 200 mil millones de dólares le costó al banco central de EEUU salvar del precipicio a Fannie Mae y Freddie Mac. ¿Más cifras de los maestros en la codicia y la megalomanía, los reyes de Wall Street y su autocosmos de gigantescas casas de campo, aviones privados, salarios exorbitantes; los jefes de los bancos financieros que jugaban con fondos y valores cada vez más complicados como si estuvieran en un casino en Las Vegas, y que al final ni ellos lograban ya comprender? La revista Stern nos revelaba a estos jugadores (y arruinadores) del casino global, con grandes fotos y enormes titulares: Richard Fuld, 62 Años, jefe de Lehman Brothers: pérdidas: 8.600 millones de dólares. Sueldo anual: 41 millones de dólares. James E. Cayne, 74 años, jefe de Bear Stearns: 19.800 millones de dólares en pérdidas de valor de su banco. Sueldo anual: 69 millones de dólares. Stanley O´Neal, 56 años, jefe de Merrill Lynch. Pérdidas: 52.000 millones de dólares. Su indemnización para largarle: 161 millones de dólares. John J. Mack, 63 años, jefe de Morgan Stanley. Perdidas: 11.000 millones de dólares. Sueldo anual: 40 millones de dólares. Robert Willumstad, 62 años, jefe de la aseguradora AIG. Pérdidas 80.000 millones de dólares. Sueldo anual: un millón de dólares más opciones. Lo dicen los expertos norteamericanos citados en esta revista: «estos deben estar en la cárcel. No tenían visión de conjunto de los números.»

Desde hace ya un tiempo venimos observando que ese modelo neoliberal que se tambalea estos días, también invadió en parte nuestro cada vez más duro, más codicioso y egoísta mercado publicitario nacional. Lo que sólo puede acabar mal. Solicito, una vez más desde este espacio al sector, más sentido común, más humanidad, más sostenibilidad. A la hora de dirigirse al consumidor, a la hora de hacer negocios los unos y los otros. Intentemos interiorizar y aplicar un poco esos fundamentos que tan grande han hecho a ese país del que les hablaba arriba. Estoy seguro de que todos ganaremos. Sin acabar como algunos de Wall Street…

Hablando de hacer las cosas de otra forma. Son cada vez más los que dan un giro a su manera de idear la publicidad. Esta semana estuvimos con Dommo Companies donde nos explicaron un interesante nuevo modelo y una publicidad muy cercana y fresca para el consumidor, con tal de hacerlo mejor y distinto. Véalo aquí en original y si eso pruebe con ellos. Nace una gran comunidad online de publicitarios de un gran player de este sector que también se adapta a los tiempos nuevos y cambiados: MPG (Havas Media) nos presentó este martes su increíble MPG Community. ¿No pudo ir? ¿No le invitaron? Ya no importa. Nosotros vamos a todos los sitios para llevarle siempre GRATIS y como amigo nuestro. Aquí la presentación que dio su presidente.

¡Esperemos (y recemos) ahora todos por que la catástrofe financiera en EEUU se vaya resolviendo!

Javier Piedrahita
Director
MarketingDirecto.com
Teletipo del Marketing
Mail Marketing
Email: javier@marketingdirecto.com

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