¿Y qué pasa con la ética en comunicación y marketing?
Comenzó el año y pudimos estrenar regalo de Navidad/Reyes entrando en la era de la televisión lineal en máxima calidad UHD /4K con HDR. Como decía en mi tuit de ayer: si nuestras acomodadas televisiones nacionales no quieren o pueden emitir algún canal completo en un formato actual y del 2018 de máxima calidad para nuestro nuevo Samsung QLED Q7F 55″, toca «irse» al extranjero europeo vía satélite Astra que por suerte no sabe de impedimentos de fronteras y derechos televisivos vía reprimidor geoblocking por países, ni de limitaciones de calidad UHD o Full HD no nativo y otras triquiñuelas que soporta el espectador español.
Tan fácil «escapar» al deprimente panorama-técnico-mediático-español (ni radios en DAB+, ni TV emisiones lineales en UHD HDR) como conectar el nuevo televisor Q7 a la parabólica, solicitar vía Amazon la tarjeta HD+ con su módulo CI+ de Astra y ya entras en una fascinante nueva dimensión 4K HDR real, sintonizando gracias a esa tarjeta HD+ los canales internacionales (inglés, alemán) de programación 24 horas lineal UHD1 y el de viajes TravelXP en esa definición de auténtico cine calidad, que te dejará boquiabierto en tu salón, dormitorio u oficina.
Experiencia televisiva más que recomendable para todo anunciante, agencia, marketero que como decía en un reciente tuit con motivo de la gran feria de la electrónica de consumo, el CES de Las Vegas, «quien desea seguir en el sector de la comunicación debe ser capaz de entusiasmarse con la tecnología». Estar a la última en lo tecnológico, probarlo, curiosear, trastear, aplicarlo a su negocio. Y más si somos periodistas de todo esto.
Aunque, aparte de apasionarse por este sector, quien comunica también tiene responsabilidades. Y obligaciones éticas. Algo de lo que sin embargo se habla muy poco por aquí, en congresos, ruedas de prensa o publicaciones. Justo sobre ello hablaba en una entrevista con la revista «Lead» el fundador de la agencia digital «C3», Lukas Kircher. Escuchémosle:
«No es fácil encontrar en estos tiempos el equilibrio ético. Sacar el máximo en KPIs para el cliente y a la vez como persona (padre, madre, tío, tía, etc) observar el mundo que dejamos a nuestros hijos. Pero es importante observar ese malabarismo y diferenciarlo, darle nombre: tanto los riesgos como los efectos secundarios.
Algo que debemos recordarnos constantemente: nuestro sector organiza encuentros de personas vía Facebook, Snapchat, libros, revistas, periódicos, Big Data, etc. Todo esto son infraestructuras del encuentro. Infraestructuras en las que puede existir un encuentro real con valor añadido. De persona a persona. De persona a empresa. O, si no, estas infraestructuras se tornan en armas con los que inconscientemente rompemos nuestras relaciones y convertimos a nuestros hijos en «Pokémon Adrenalina Yonquis».
Los retos son grandes: ¿Cómo logramos orquestar bien todas las nuevas posibilidades tecnológicas como la inteligencia artificial, blockchain o la realidad aumentada, de tal forma que realmente mejoren nuestras vidas? Sí, no es algo fácil.
Al menos me animan las agencias que parece que van tomando consciencia de la ética. Recientemente Ogilvy ha creado el puesto del Chief Ethics Officer. Esto nos da una cierta consciencia para la ética. Una consciencia de que tenemos que tematizar fenómenos como las fake news o el hacking. Toca ir afinando esa consciencia. Ampliar el diálogo al respecto. De forma interdisciplinaria. Y a nivel sociedad.
No necesitamos más debates sectoriales. Toca reconocer las cosas y posicionarnos. Como sector. Como personas. Como creadores de comunicación y relaciones. Toca escuchar. Pero de verdad. Y mirar. Y diferenciar. Y nombrar los asuntos. Tanto las oportunidades como los riesgos o los efectos colaterales.»
¡Sector, en 2018 otro importante asunto a tener mucho más en cuenta, por favor! La ética en nuestro día a día. (Arrancar así de mal 2018 como lo ha hecho la marca H&M y como ningún otro medio sectorial ha querido contárselo ampliamente, no debe suceder más.)
Le deseo una semana de buena y necesaria consciencia al respecto,
MarketingDirecto.com
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